lunes, 10 de septiembre de 2018

Encantando

Entre los simpáticos e insoportables videitos que te mandan para Rosh Hashaná vía WhatsApp, Facebook o similar, se destaca éste que yo no sé porqué se llama "Yo no sé porqué nos dicen rusos", ejecutado con entusiasmo por el coro Halevay, formado por cinco señoras y un caballero, sumando entre todos ellos no menos de 500 años.
El autor de la letra tendría un trauma con el matzá porque aparentemente habría quedado constipado desde Pésaj. Al final aparecen los créditos, por lo que los responsables de la grabación podrían ser fácilmente detenidos. Los coristas deben ser considerados inimputables.

El calvario de Jean Pierre Noher

Jean Pierre Noher
Ayer, en el programa del incisivo Mauro Viale por A24 se cruzaron el rabino Sergio Bergman y el Sr. Jean Pierre Noher.
Noher comienza con su (espuria) carta más alta: compara al macrismo con el nazismo. ¿Cómo es eso, Macri matando judíos? No, resulta que estigmatiza a los kirchneristas segregándolos como grupo K. Sería algo así como que a la banda de Al Capone no se la podía denominar banda. Y causalmente (sic) durante el cristinismo asesinaron a un judío, que era fiscal de la Nación. Luego de formular preguntas sin aguardar respuestas, como tienen por costumbre todos los cómplices de la Abanderada de los Humildes, recita en hebreo una media bendición, como quien dijera "Al que nace barrigón, andá a patear tachos a la esquina".
Bergman trata de responder con los buenos modales que caracterizan al actual gobierno, descalificando la utilización de la Shoá, pero es tapado por el griterío de Noher, táctica de manual K (uh, yo también estigmatizo).
Noher recuerda como estandarte de su furia a sus abuelos masacrados por el nazismo, pero eso nos sucedió a casi todos los ashkenazim (judíos originarios de Europa central y oriental).
(En este punto debo aclarar que solamente pude consultar videos filokirchneristas, que seguramente habrán sido prolijamente editados.)
Luego el incisivo Viale (de tal palo tal astilla, no te llegues a topar con el hijo en CNN) prosigue una amable conversación con Jean Pierre, que repite con fidelidad la monserga cretinista (sic).